¡Hola a todos!
Han sido dos semanas fantásticas de comenzar mi viaje de regreso a un estado más saludable, física, emocional y mentalmente.
Cuando comencé, no esperaba tener un sistema de soporte tan increíble. Para mi sorpresa y asombro, era mas grande de lo que jamás podría imaginar. Agradezco a cada uno de ustedes uno por acompañarme y alentarme en mi viaje. Fue el impulso que necesitaba para ganar la batalla dentro de mí.
Me ha llevado un par de años volver a motivarme, y desde mi primer blog, aproximadamente 6 meses, finalmente, actuar. ¿Por qué me tomó tanto tiempo? Porque en la batalla que estaba teniendo dentro de mí, el lado oscuro estaba ganando.
"Algunas de las batallas más grandes se pelean dentro de las cámaras silenciosas de tu propia alma/mente". - Ezra Taft Benson.
Esta cita ilustra mi vida entera y posiblemente muchos de ustedes puedas relacionarse. Lo que pensamos de nosotros mismos puede realmente impactarnos más de lo que puedes pensar. En mi caso, realmente impactó mi vida e incluso alteró mi propósito. "Pero Gio, eres fuerte y valiente, ¿cómo pudo haberte impactado?" Ah, bueno simple, yo era y sigo siendo mi peor crítico.
Desde que puedo recordar, siempre que hice algo mal o me castigaban por algo, siempre me decía que era una idiota por cometer mis errores o por hacer lo que no debía hacer. Ese pensamiento fue posiblemente el menos perjudicial porque es normal sentirse avergonzado o decepcionado de uno mismo cuando hace algo mal.
Pero cuando sentí que estaba ocurriendo cada vez más, o que la vergüenza de lo que estaba haciendo era más y más fuerte, esos pensamientos se volvieron más y más oscuros. Llegó a un punto en el que caí en una profunda depresión durante mis años de escuela secundaria. No estoy seguro de si alguien lo ha notado, pero había días en que deseaba estar muerto. Yo había perdido mi valor. Había perdido quien era, y cada error me llevaba más profundo en la oscuridad.
Se puso tan serio que intenté varias veces quitarme la vida, pero no lo suficientemente fuerte como para llevarlo a cabo por completo, me sentiría como un fracaso peor por no haber tenido éxito con mi propio muerte. Bastante oscuro eh?
Bueno, lo bueno es que mejoré. Encontré la luz dentro de mí y la alimenté con más madera para que pueda comenzar a arder y brillar más. Finalmente, salí de mi depresión, fui a una misión y sentí que mi vida se estaba volviendo más positiva en algo por lo que valía la pena vivir. Pensé que había ganado. Pensé que había vencido la oscuridad...chico, estaba equivocado.
En un blog anterior, expliqué que soy un hombre muy emocional, más de lo normal. Años después de mi misión, la oscuridad comenzó a arrastrarse de nuevo. ¿Por qué? Porque todas las luchas que ocurrían, cada erro que estaba cometiendo, dentro de mi mente, me decía a mí mismo que no servía para nada. Todo fue mi culpa. El dolor, la miseria, todo fue causado porque solo soy una maldición para todos los que me rodean. Todo el mundo está mejor sin mí. Estoy mejor muerto. Oscuro de nuevo. Sin esperanza. Sin salvación.
Ahora, normalmente soy una persona muy extrovertida. Naturalmente, me encanta hacer nuevos amigos y conocer a muchas personas, pero cuando esto sucedió antes y una vez más, comencé a alejarme de todos. Porque empecé a sentirme como una molestia para todos, así que prefiero quedarme quieto y escuchar música o ver cualquier programa, solo para evitar molestar a alguien.
Entonces, ¿cómo me saqué de esto esta vez? No lo hice. Todavía estoy allí. sigo pensando que todos estarían mejor sin mí. Sigo pensando que mi muerte sería una bendición para quienes siento que he sido una carga con mi presencia. Todavía ocasionalmente me alejo para estar solo. Entonces, si ves eso, solo sé que no estoy siendo antisocial o estancado, solo que la batalla es fuerte y prefiero no hablar.
Sin embargo, esta vez mi lucha es más grande. Mi motivación es más fuerte y mi luz interior se fortalece diariamente a través de sesiones de desarrollo personal centradas en que mi valor brille. Como dije, todo tu amor y ánimo, realmente me hicieron ver a quién le importa, cuando creía que no había ninguno. Mi encantadora y bella esposa, ha sido un gran apoyo durante esos tiempos y estoy muy agradecida de tenerla a mi lado.
Para ell y mis dos niñas, trabajo diariamente para eliminar la oscuridad y mantener la luz. Para ellos, mejoro físicamente para mantenerme al día mientras exploran el mundo. Para ellos, me mejoro emocionalmente para poder ayudarlos y saber cómo consolarlos. Para ellos, me convierto en lo que siempre he querido ser, porque merecen lo mejor de mí.
Y ese es mi verdadero objetivo.
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